Primeros auxilios para la afección del coronavirus en casa.
ADVERTENCIA
Estos primeros
auxilios se basan en uno de los cuatro principios de Hipócrates que dice
“Natura Medicatrix” o sea “La naturaleza cura” y también dicho de otra manera,
“El cuerpo se cura solo” por medio de la Homeostasis, de modo que solo la
naturaleza del individuo es capaz de curarlo.
Cualquier enfermo
que ponga en práctica estos primeros auxilios tendrá que recurrir a ellos oportunamente
haciéndolo bien hecho.
De manera que son
los agentes naturales de vida tales como agua, el barro, la frutas, verduras,
semillas, cereales, etc. y las prácticas higiénicas aquí recomendadas las que
restaurarán la salud al cuerpo a fin de que la posible curación la realice su
propia naturaleza o fuerza activa.
Estos primeros
auxilios han sido elaborados para fines de educación física. El autor provee
esta información y el lector la puede aceptar en el entendimiento de que los
primeros auxilios en casa y las prácticas higiénicas las hará el enfermo
totalmente bajo su propia responsabilidad. En ningún caso, ni bajo ninguna
circunstancia el autor se hace responsable o cargo de alguna persona.
Primeros auxilios de la afección del corona-virus en casa.
Sintiéndose mal la persona,
ante todo se debe procurar de desocupar su intestino y activar el calor de su
piel y extremidades.
Si el vientre no se
ha desocupado en el día habrá que aplicar
en ayunas un enema o lavativa con agua natural, pudiendo añadir unas
gotas de aceite de olivo virgen, por tres días seguidos. Para los adultos
bastará con un litro de agua, repitiéndola si no hay efecto en 6 horas hasta
obtener evacuación.
Si el cuerpo pide
reposo, se mantendrá en cama el enfermo y, una vez calientes sus pies, se
procederá a aplicarle frotaciones de agua fría con toalla a todo el cuerpo,
cada hora, abrigando sin secar.
Estas frotaciones
cada hora serán de 4 a 6 cada día para niños y ancianos y de 6 a 8 en adultos,
cuidando siempre la reacción del calor. Si esta reacción es débil se alejarán
las frotaciones, haciéndolas cada hora y media.
Si hay mucha
fiebre o calentura cada frotación debe ir seguida de compresa de toalla húmeda
fría o fajado de barro. Ver publicación “El barro” en este blog del 18 de Enero
de 2018.
Si no hay mejoría
en pocos días, en los siguientes se hará un paquete largo de 10 a 11 de la
mañana y frotaciones en la tarde.
Durante la noche
el enfermo, niño, anciano o adulto dormirá con fajado de lodo sobre todo el
vientre. Cuidando la reacción, o sea, que el lodo se caliente con el calor que
extrae del interior del cuerpo. Para evitar enfriamiento, la capa de lodo debe
ser de 4 a 5 milímetros de espesor.
Si la fiebre o
calentura es muy alta, la cataplasma se aplicará sobre riñones y vientre,
colocando primero la de los riñones y luego sobre el vientre.
La dieta del
enfermo en cama será exclusivamente cruda a base de frutas y ensaladas,
comiendo poco cada vez y de acuerdo a sus deseos. A los niños hay que agregar
almendras dulces, nueces, avellanas o crema de cacahuate. Si no pueden masticar
se les darán lechadas de almendras o jugos de fruta. A falta de frutas, se
recomienda avena cruda remojada en agua fría una o más horas y se endulza con
miel o se le agregan frutas dulces, como pasas de uva, higos o plátanos.
Si se transpira
mucho con las frotaciones, la sed se apagará con limonadas o naranjadas sin
azúcar. También se recomienda jugos de fruta natural.
El intestino debe
desocuparse cada día aunque nada se coma, pues por esa vía no solo se expulsan
desechos ácidos de la digestión, sino también la bilis, veneno que secreta el
hígado y que no debe retenerse en el cuerpo.
Aire puro de día
y de noche es indispensable para restablecer la salud del enfermo.
No hay que
sofocar los síntomas, sino dirigir la atención a normalizar la digestión del
enfermo y activar las eliminaciones de sus intestinos y piel con transpiración
o reacción de calor, fiebre o calentura curativa.
Cuando el pulso
haya bajado a 80 en los niños y ancianos, o a 70 por minutos en adultos, ya
habremos dominado la fiebre o calentura interna que es el enemigo que debemos
combatir.
Ver publicación “Las temperaturas del cuerpo” de fecha 18 de
Noviembre 2017.
Casos hay en que
la piel del paciente esté fría no tolerando las frotaciones de agua natural
fría. En estos casos, antes de la aplicación fría, se procurará calentarla con
trapo de lana o fibra natural de ixtle o lufa.
Por fin, el
tratamiento aquí expuesto se repetirá diariamente hasta obtener el
restablecimiento de la salud del enfermo, lo que se conseguirá a los 14 días.
Salvo procesos febriles más crónicos.
Restablecida la
normalidad del pulso y la digestión, vueltos el hambre y el ánimo. El enfermo
abandonará la cama, cuidando siempre su digestión y evitando se le enfríen los
pies.
Mientras tanto, !
Quédate en casa!!
Buena salud a
todos.
Bibliografía,
Comments
Post a Comment